miércoles, 4 de mayo de 2011

La idiotez de decir.


Se te haría IMPOSIBLE imaginar la forma en la que estoy deseando  un abrazo tuyo en este momento. Nunca fui una persona dependiente, pero no me pidas que la influencia de la música bien apenada no este presente de un modo locuaz durante todo la catarsis.
La mayoría del tiempo soy una niña mala, me asustaría un poco demasiado si no lo fuese.
En mis ojos se ve alguna marca? Soy eterna actriz y espectadora de mi drama eterno.
La idiotez de decir: Dispongo de poco tiempo. Cuando es tú tiempo el que no dispone de mi. mi cama me queda grande, los días me quedan grande, todo me queda grande y miserablemente vacío

Y no te olvides; sólo una cosa es necesaria: Todo de ti.
Querer en el recuerdo -no exactamente un recuerdo, sino emociones y sentimientos que en el recuerdo persisten adheridos a su materia deseada y servida una herida q se expande y ramifica cada día más. Especial tonalidad de ese querer: lo que hace tan penetrante es que vale como un sentimiento vivo y actual aplicándose a una materia parecida. SENTIR hoy lo que entonces FUE. A veces siento que no te soporte de forma tan abstracta porque te necesito aquí. porque estas más presente que nunca mi días se resumen a equívocos hechos con el fin de no pensarte y gritar tu nombre. Morfeo apiádate de mi y absórbeme hasta que el mal sentir constante y el malestar persistente desaparezcan.
Como si en sueños se alcanzara a veces la pureza necesaria para atrapar esencias, ciertas fábulas soñadas dejan al despertar la ansiedad maravillada del que retorna del mar, de una cima, de las sustancias originales.
Solo me queda un amor que ilusamente te espera, a ver si en una de esas ocurre el milagro. y despierto de toda esta pesadilla, aunque eso implique despertar cada mañana y sentirme miserable por no tener el valor para asumir que esto es la realidad.

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