Es un mal estado de sentir constante, de caer persistente.
Tener q hacerle frente a cambios y presiones perseverantes es parte del juego no interrumpirse en el estado qe se encuentra, lleva a un inevitable catastro, sin variar su intensidad, velocidad constante, temperatura constante, dolor constante, un viento constante, signos que dificultan la travesía, mientras que la influencia de la música bien apenada están presentes de un modo locuaz durante todo la catarsis
Parece que el cuerpo se encuentra en una situación inhibitoria de degeneración, personas q no pueden sentir algún cambio en el curso de sus días, esta es una trampa en la cual muchos caemos en cuanto nos aflige un mal grande o pequeño condición mental producida por el pensar y sentir del individuo . realidad q agobia y me supera
No entenderías.
La mayoría del tiempo soy una niña mala, me asustaría un poco si no lo fuese.
4 comentarios:
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Siempre es como si las palabras y su tiempo estuvieran desajustadas, como si lo que debiera decirte ya no fuese oportuno, o no lo será un día en que vos o yo faltaremos, y nada podrá ser dicho.
Sólo en sueños, en la poesía, en el juego nos asomamos a veces a lo que fuimos antes de ser esto que vaya a saber si somos.
Qué vanidad imaginar
que puedo darte todo, el amor y la dicha,
itinerarios, música, juguetes.
Noches de plazas, de capuchinos, de ardientes nadas...El amor mirado desde una tacita de café,el precio de un silencio.
Ciertas caricias, la extremidad apenas material de un dedo rozando la nuca, donde vive la especie más dulce de cosquilla.
La idiotez de decir: Dispongo de poco tiempo. Cuando es el tiempo el que dispone poco o mucho de ti.
Y no te olvides;sólo una cosa es necesaria: Todo.
Que mi tiempo sea yo, o yo mi tiempo, constituye otro problema.
Lo contrario de la realidad, es la realidad. Si no le creemos al razonar (que busca y alcanza SU verdad, no siempre la nuestra), la piel lleva a creerla, a aceptar su confusa y continua aseveración.
Querer en el recuerdo -no exactamente un recuerdo, sino emociones y sentimientos que en el recuerdo persisten adheridos a su materia deseada y servida. Especial tonalidad de ese querer: lo que hace tan penetrante es que vale como un sentimiento vivo y actual aplicándose a una materia parecida. SENTIR hoy lo que entonces FUE.
Como si en sueños se alcanzara a veces la pureza necesaria para atrapar esencias, ciertas fábulas soñadas dejan al despertar la ansiedad maravillada del que retorna del mar, de una cima, de las sustancias originales.
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